[Escrito realizado por Miriam Magdalid Ortega González]
Amigos... son dos que marchan juntos.
Aristóteles
Aristóteles, en su ética Nicomaquea comparte gran parte de su pensamiento filosófico, el cual incita a debatir sobre temáticas que desde la antigüedad hasta nuestros días no han dejado de poseer relevancia, y una de ellas es la amistad.
Con esta humilde investigación, pobre seguramente, quisiera hacer notar cómo Aristóteles define a la amistad, y cómo es que esta, se valora en la actualidad.
La ética es la parte de la filosofía que atiende al valor de la conducta humana; para el Estagirita, el bien en cuanto a obrar, es el fin supremo al que debe aspirar el hombre, pero no para el beneficio propio solamente, sino en cuanto a un bien social.
Aristóteles trata de aclarar lo que el hombre debe tener presente en su actuar u obrar ético, pues philia es “lo más necesario en la vida”, dicha perspectiva corresponde a las virtudes, ya que el obrar correctamente es partícipe de lo que “está bien”.
Según Aristóteles ninguna de las virtudes morales se origina en nosotros por naturaleza, pues nada de lo que existe por naturaleza puede formar un hábito contrario a su naturaleza.
No dudo que más de alguno opinará que debido a las contradicciones que son inherentes a toda época histórica, se pregunten ¿por qué Aristóteles justificó plenamente a la esclavitud?, pero sólo se puede discernir que la esclavitud formaba parte de un todo social, que a Aristóteles le tocó vivir, como un ciudadano más.
Sin embargo, en los libros VIII y IX de la Ética Nicomaquea nos deja todo un legado que puede ser útil para poder asimilar la amistad como una gran virtud que se debe cultivar, y que desafortunadamente en el período tan complejo que vivimos actualmente parece difícil poder retomarla y considerar que es una virtud. El concepto amigo se deriva de la palabra griega “filos”, de la proposición querido, es decir; acto de amar.
Para Aristóteles las virtudes éticas son aquellas que se desenvuelven en la práctica y que van encaminadas a la consecución de un fin; sirven para la realización del orden de la vida del Estado, una de ellas es la amistad, que desempeña su origen directo en las costumbres y en el hábito, por lo cual pueden llamarse virtudes de hábito o tendencia.
Según Aristóteles la amistad es algo próximo a la virtud y al parecer la virtud es la medida de todas las cosas. La amistad es una de las necesidades más indispensables de la vida, nadie aceptaría estar sin amigos, aún cuando posea todos los demás bienes. Cuando se es joven, se necesita de la amistad para obtener un apoyo o un consejo; y cuando se es viejo, se reclaman los cuidados y auxilios necesarios que se dan por medio de ella.
Aunado a esto, parece que existe una ley natural en el corazón de las personas. Sin embargo, es importante señalar que este sentimiento no está presente únicamente en los seres humanos, sino también en los animales, aunque su manifestación principal es en el ser humano. En la amistad se encuentra el bien humano y perfecto, la amistad es una necesidad de cada uno por el otro, y este encuentro con el otro nos permite dar amor. Muchos creen que una amistad se da con mayor facilidad cuando ambos son afines, y otros opinan todo lo contrario. Por eso Sócrates en el diálogo de Lysis o de la amistad opina: “Se desea aquello de que se tiene necesidad…” (PLATÓN, 2005:102).
Es por esto que se ama lo que se desea, es decir, lo que no se tiene y que incluso puede ser completamente opuesto a algo que se necesita, otros opinan que lo semejante es amigo de lo semejante.
Según Aristóteles, existen tres especies de amistad: los que se aman por interés, esto es, por la utilidad que pueden sacar el uno del otro; los que se aman por placer, o que buscan el placer por el mismo placer. Se puede decir que estas son amistades indirectas accidentales. Estas amistades se rompen fácilmente. El tercer tipo de amistad es la perfecta, la de los hombres virtuosos, que se desean el bien en tanto que son buenos.
En la amistad virtuosa, se desea el bien absoluto; por esta razón en el diálogo de la amistad se comenta: “Los verdaderos amigos son los hombres de bien…” (PLATÓN, 2005:93)... (ir al documento completo)
Me gusta el epígrafe y claro tambien en general el trabajo, pero a mi el Gran halcón blanco, el General Griffith en contraste con tu epígrafe me dejó una frase, haber que les parece (que se ha convertido en una de mis preferidas):
ResponderEliminar"Para mi, un amigo es alguien que está a mi altura y que tiene su propio sueño" Griffith.
Saludos colegas ;)
mmm... amigos por utilidad, placer o virtuosismo... creo que en estos tiempos abundan más de los primeros más que nada; no me acuerdo si tú dijiste eso... amigable lectura, miriam...
ResponderEliminar